lunes

Diástole



Qué más es?
Qué más da?
Si las cosas seguirán igual...




Comencemos a andar por la líneas paralelas que delimitan los extremos de nuestra existencia y vayamos leyendo todos los letreros que se crucen en nuestra pequeña carretera. Los símbolos son nuestra especialidad y vamos a utilizarnos en nuestro propio beneficio, cada color delatará una finalidad y cada olor, un destino. Los sabores son reglas metódicas para restringir posibilidades pero están a un segundo plano; las cosas no tienen por qué saber bien para entrar en nuestra vida y quedarse, tan solo deben tener aspectos llamativos y extravagantes y precios desorbitados e insondables.
Colócalo ahora a la vista de todos, ponle un letrero luminoso y que se encuentre a la altura de la muñeca.
Ahora tus capacidades se multiplican por el número de personas que entran en su contacto, para bien o para mal, no dejarán de hablar de ti y eso te gusta, porque te da fama, dinero, volatilidad… Te mezclas con el viento.
Estas dentro, puedes controlar lo que quieras, puedes cambiar tus colores, tus sabores, tus olores y tu modo de empleo. Multiplicar por 15 tu número de empleados y reducirles el sueldo a la mitad. Contratar a niños, que son mano de obra aún más barata…
Eres Dios, pero con DINERO.
La gente te adora, te ama, te besa, te compra, te ansía, te desea, creará de ti un fetiche, se masturbará sobre tu esencia, te utilizará para ligar, para casarse, para vivir, te NECESITARÁ.
Y todo, porque un día, elegiste poner un letrero luminoso a la puerta de tu casa; y todo, porque una mente caprichosa decidió quererte para su colección particular de miniaturas; y todo, porque sucumbiste a tu frivolidad.




Yo no sé
qué más da,
Ni si quiera qué va a pasar...