Cuando me hablan del destino

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A veces el destino te enseña todo lo que no te enseñan las personas; a veces, y digo a veces porque aún soy joven, podemos deducir todo lo que va a ocurrir con alguien antes incluso de que comience. A veces la vida ya no sabe sorprendernos, y a veces nos guiamos por “eslóganes” sin observar qué nos están vendiendo.
Nos dejamos engañar, señores, dejamos entrever lo fácil que es engañarnos y disuadir las casualidades cada vez se hace más frecuente.
Floto en circunstancias adversas, el mundo es un pañuelo, me reencuentro con mi pasado constantemente y todo lo que veo es una puerta con el cartel de –Salida-. Hay que vivir el día a día, hay que saber exprimir el jugo de cada segundo, porque cada uno, merece ser recordado.
Cada momento, es el mejor momento de tu vida porque nunca sabes, y nunca es nunca, lo que puede ocurrir mañana; si es mejor, habrás perdido una posibilidad irrefutable de haber sido feliz, y si es peor, habrás perdido la increíble oportunidad de serlo.
Nos engaña el tiempo cuando creemos que no nos engaña y nos vende gato por liebre cada vez que puede; la solución, saber que cada momento que vives, es el mejor de tu vida, porque el pasado ya está vivido y del futuro nunca se sabe, porque el presente es lo único que te realmente tenemos y por ello hemos de disfrutarlo al máximo.

Y si las circunstancias cambian y son adversas,

vívelas!

aprobecha tus multitudes;

porque como decía Walt Whitman:

"Qué me contradigo?

Sí, me contradigo, y ¿qué?

Soy inmenso,

y contengo multitudes..."

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Cuando me hablan del destino, cambio de conversación...

Diástole

Qué más es?
Qué más da?
Si las cosas seguirán igual...

Comencemos a andar por la líneas paralelas que delimitan los extremos de nuestra existencia y vayamos leyendo todos los letreros que se crucen en nuestra pequeña carretera. Los símbolos son nuestra especialidad y vamos a utilizarnos en nuestro propio beneficio, cada color delatará una finalidad y cada olor, un destino. Los sabores son reglas metódicas para restringir posibilidades pero están a un segundo plano; las cosas no tienen por qué saber bien para entrar en nuestra vida y quedarse, tan solo deben tener aspectos llamativos y extravagantes y precios desorbitados e insondables.
Colócalo ahora a la vista de todos, ponle un letrero luminoso y que se encuentre a la altura de la muñeca.
Ahora tus capacidades se multiplican por el número de personas que entran en su contacto, para bien o para mal, no dejarán de hablar de ti y eso te gusta, porque te da fama, dinero, volatilidad… Te mezclas con el viento.
Estas dentro, puedes controlar lo que quieras, puedes cambiar tus colores, tus sabores, tus olores y tu modo de empleo. Multiplicar por 15 tu número de empleados y reducirles el sueldo a la mitad. Contratar a niños, que son mano de obra aún más barata…
Eres Dios, pero con DINERO.
La gente te adora, te ama, te besa, te compra, te ansía, te desea, creará de ti un fetiche, se masturbará sobre tu esencia, te utilizará para ligar, para casarse, para vivir, te NECESITARÁ.
Y todo, porque un día, elegiste poner un letrero luminoso a la puerta de tu casa; y todo, porque una mente caprichosa decidió quererte para su colección particular de miniaturas; y todo, porque sucumbiste a tu frivolidad.

Yo no sé
qué más da,
Ni si quiera qué va a pasar...

Sístole

Abarca, las horas perdidas, la calma hundida,la miseria abatida; riñones jodidos de estar agachada fregando escaleras en casas ajenas…
Vuelve, a levantarte cama mañana, cada semana, cada, cada…, historias que desgastan, cuentos para no dormir en casa, una vida, una lacra, una vida, una mancha…
Tacha, y despacha a esos que vuelven con sus telarañas,
-Pasa, hombre, pasa, tú como en tu casa-
-¿Qué casa, la de la playa?-
…Habiendo gente que es que no tiene de nada…

Calla y marca cada paso que andas, es sencillo, metido en el batiburrillo de las masas, que la gente piense que tú no piensas nada, anda calla, y anda, camina firme por las avenidas y las ramblas, y a unos metros de tu casa, echa a correr para sentir algo en la piel, que ya no sientes nada, la misma música de siempre, el mismo bar, las mismas cosas, la misma gente.
-El martes no puedo salir,-
-¿Qué echan por la tele?-

Ahora no puedo dormir, el mundo está que jode.

Para, relaja, frena el ritmo de tus ansias, debes pensar antes de hacer nada, no la vayas a cagar y luego llorando a tu mama; encuentra el momento de arremeter contra la especulación, es mi meta, la confrontación entre la sociedad y el socio, menudo negocio, andar haciendo encalves por ahí fuera, con mi suegra, hermana de Herminia, prima de un primo, amigo mío, familia del conde de Vitigudino…

Paso de Castas, paso de títulos enfermos de hemofilia, menos es el título que la información que lo guía, tratemos esto, hagamos una compañía para luchar contra el cáncer y no contra la vasectomía. Es otro punto el poder, delimitado para señores que solo lo van a utilizar para que les aten los cordones.

Invadamos entonces un país, todos juntos, con camisetas de coca-cola, demostrémosle al mundo que nunca se equivoca.La fuerza es el medio, la agresión el modo, la violencia es un género que conocemos todos, que guía la vida de los que hablan un poco, que pone tiritas en zapatos “Manolos”…

Malgasto el tiempo que me queda porque me queda tanto tiempo, que me encanta sonreir durante horas, tan solo mirando al cielo